ENTRE ZAPATOS TE VERÁS
La mayoría de las mujeres nunca dejarán que notes su dolor provocado por unos extraordinarios tacones de 12 cm.
Hoy pensaba en lo importante que son los zapatos que usamos, pocas veces le damos importancia, más allá de si están limpios, si lucen bien, si son cómodos, si combinan… nada más hay. Aunque hoy creo que si debe haber más allá y si no lo hay pues lo intentaré buscar.
A veces creo que hay profesionales que buscan hacer análisis de lo que sea, de lo que ven, escuchan, sienten o imaginan y pienso que lo hacen porque no tienen otra cosa mejor que hacer o porque simplemente quieren sentirse interesantes, para que algún día puedan decirte, claro, yo sí lo pensé y tu no, seguramente porque su visión es más amplia.
Por favor, yo no pienso hacer lo mismo, solo quiero hablar de los zapatos de la gente, qué pasaría si pudieran hablar, qué pasaría si pudieran rechazar al dueño para nunca más tener contacto con su humanidad. Incluso me imaginé una revolución, una huelga de zapatos, pues si ellos pudieran expresarse, juro que muchos desearían liberarse del pesado trabajo al que están encomendados.
Si los zapatos hablaran… pero qué digo, ¡claro que hablan!... es más gritan.
Discretamente mira los pies de la persona que está cerca de ti. Seguramente hoy eligió unos zapatos viejos, holgados, algo maltratados, pero que le resultan verdaderamente fascinantes, prácticos y mejor aun, soportarán su peso durante el día sin reclamo. Entonces puedo asegurar que si los zapatos de esa persona cumplen con las características anteriores, entonces puedo creer que la persona ha tenido días complicados, que prefiere la comodidad a la estética y que solo quiere estar cómoda, nada más, no hará un esfuerzo más, no quiere que nada le duela, solo quiere estar… estar en su zona de confort. ¡Changos!, qué atrevida!!, segura estoy de que puedo equivocarme, pero eso me dicen los zapatos. No sé qué diablos te digan a ti.
Sigue buscando zapatos, anda, anda es divertido, un par más… Pueden ser abiertos, de esos que dejan salir los dedos gordos, muchas veces reflejan el poco cuidado y amor que la propia persona de tiene, pues las uñas también dicen mucho… pero no me meteré en ese tema, aún. También un par de huaraches puede decirte mucho del tiempo que tuvo la persona por la mañana antes de salir de casa o si le duele algo y prefiere sentirse como si estuviera descalzo.
¿Has visto las suelas?, ¿la forma en que se desgastan?, también suelen decirte mucho de la forma en que caminan las personas, si acostumbra echar hacia al frente el cuerpo de forma atrabancada, si la gente es reservada y se tira hacia atrás… yo diría que son prudentes, mientras que otros desgastan sus suelas por los lados, entonces simplemente se trata de un problema de formas perniles.
Es entonces momento de hablar de los tacones !oh! benditos y milagrosos tacones; estilizan la figura, te hacen ver mucho más alta y en la mayoría de las mujeres ayuda a mejorar la postura, apretar el vientre y sacar el pecho. Sin embargo, por lo regular a tras de una guapa mujer entaconada, hay un doloroso sacrificio, pues provocan dolor de espalda, hinchazón de pies, dolor, ampollas y a veces hasta heridas. La mayoría de las mujeres nunca dejarán que notes su dolor provocado por unos extraordinarios zapatos de tacón de 12 cm, otras, en cambio, que no resisten la batalla, preferirán los aburridos y sanos zapatos bajos.
Ahora mira tus propios zapatos, qué dicen de ti… ¿dicen lo que quieres que digan?, ¿no dicen nada?... hoy, yo creo que sí
Hoy pensaba en lo importante que son los zapatos que usamos, pocas veces le damos importancia, más allá de si están limpios, si lucen bien, si son cómodos, si combinan… nada más hay. Aunque hoy creo que si debe haber más allá y si no lo hay pues lo intentaré buscar.
A veces creo que hay profesionales que buscan hacer análisis de lo que sea, de lo que ven, escuchan, sienten o imaginan y pienso que lo hacen porque no tienen otra cosa mejor que hacer o porque simplemente quieren sentirse interesantes, para que algún día puedan decirte, claro, yo sí lo pensé y tu no, seguramente porque su visión es más amplia.
Por favor, yo no pienso hacer lo mismo, solo quiero hablar de los zapatos de la gente, qué pasaría si pudieran hablar, qué pasaría si pudieran rechazar al dueño para nunca más tener contacto con su humanidad. Incluso me imaginé una revolución, una huelga de zapatos, pues si ellos pudieran expresarse, juro que muchos desearían liberarse del pesado trabajo al que están encomendados.
Si los zapatos hablaran… pero qué digo, ¡claro que hablan!... es más gritan.
Discretamente mira los pies de la persona que está cerca de ti. Seguramente hoy eligió unos zapatos viejos, holgados, algo maltratados, pero que le resultan verdaderamente fascinantes, prácticos y mejor aun, soportarán su peso durante el día sin reclamo. Entonces puedo asegurar que si los zapatos de esa persona cumplen con las características anteriores, entonces puedo creer que la persona ha tenido días complicados, que prefiere la comodidad a la estética y que solo quiere estar cómoda, nada más, no hará un esfuerzo más, no quiere que nada le duela, solo quiere estar… estar en su zona de confort. ¡Changos!, qué atrevida!!, segura estoy de que puedo equivocarme, pero eso me dicen los zapatos. No sé qué diablos te digan a ti.
Sigue buscando zapatos, anda, anda es divertido, un par más… Pueden ser abiertos, de esos que dejan salir los dedos gordos, muchas veces reflejan el poco cuidado y amor que la propia persona de tiene, pues las uñas también dicen mucho… pero no me meteré en ese tema, aún. También un par de huaraches puede decirte mucho del tiempo que tuvo la persona por la mañana antes de salir de casa o si le duele algo y prefiere sentirse como si estuviera descalzo.
¿Has visto las suelas?, ¿la forma en que se desgastan?, también suelen decirte mucho de la forma en que caminan las personas, si acostumbra echar hacia al frente el cuerpo de forma atrabancada, si la gente es reservada y se tira hacia atrás… yo diría que son prudentes, mientras que otros desgastan sus suelas por los lados, entonces simplemente se trata de un problema de formas perniles.
Es entonces momento de hablar de los tacones !oh! benditos y milagrosos tacones; estilizan la figura, te hacen ver mucho más alta y en la mayoría de las mujeres ayuda a mejorar la postura, apretar el vientre y sacar el pecho. Sin embargo, por lo regular a tras de una guapa mujer entaconada, hay un doloroso sacrificio, pues provocan dolor de espalda, hinchazón de pies, dolor, ampollas y a veces hasta heridas. La mayoría de las mujeres nunca dejarán que notes su dolor provocado por unos extraordinarios zapatos de tacón de 12 cm, otras, en cambio, que no resisten la batalla, preferirán los aburridos y sanos zapatos bajos.
Ahora mira tus propios zapatos, qué dicen de ti… ¿dicen lo que quieres que digan?, ¿no dicen nada?... hoy, yo creo que sí
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